Los antiguos sabios chinos observaron que en la naturaleza existen unas energías, a las cuales llamaron "energías vitales" o "Chi", que son las responsables de animar todo lo que hay en el mundo y que influyen en todos los aspectos de la vida de los seres humanos y de su entorno. O sea, que para vivir era necesario el Chi. También descubrieron que el Chi no siempre influye armoniosamente: los cambios en el paisaje lo pueden influenciar positivamente o negativamente. Llegaron a la conclusión que las líneas rectas, las aristas y los caminos sin salida eran algunas de las formas que impedían la libre circulación del Chi. Vieron que la propia naturaleza daba toda la información necesaria para obtener una mejor calidad de vida. Entonces surgió una nueva manera de ver la vida, y la llamaron Feng-Shui (viento y agua).
Desde muy antiguo, los jardines chinos intentaron reproducir la esencia de la naturaleza con formas y materiales que influyesen en los cinco sentidos, y siempre acompañados del agua. Recuerden que la energía la transporta el viento y la retiene el agua. Un jardín Feng-Shui.
EL CHI
Debe caracterizarse por una circulación libre y con armonía del Chi, no tiene que ser demasiado diferente de los jardines que estamos viendo diariamente. Lo único que lo diferencia es que, además de ser un lugar bonito, tiene que conectar el hombre con la naturaleza.
Un jardín Feng-Shui, por pequeño que sea, debe ofrecer aislamiento y serenidad, y tiene que dar la sensación que no le falta ni le sobra nada; en definitiva, tiene que ser armonioso para sus propietarios.
EL TERRENO
Un jardín que ya esté diseñado, con el suelo enladrillado, debería permitir que se pudieran separar un poco los ladrillos o construir unas jardineras alrededor para que crezcan allí las plantas.
Tampoco tiene que ser todo de tierra con plantas. En la naturaleza existen la tierra, las piedras y las plantas. Siempre de acuerdo con las dimensiones del jardín, se debe conseguir un equilibrio entre los elementos.
En un jardín Feng-Shui, las plantas no tienen que estar clasificadas por zonas, diferenciadas perfectamente las unas de las otras, tiene que haber zonas muy visibles y zonas semiescondidas, lugares en donde poder encontrar intimidad.
LAS FORMAS
Las formas circular o en curva son las mejores. Al pasear, con un cambio repentino de recorrido se pierden las dimensiones reales y se abre un amplio abanico de sorpresas y misterios.
Si una esquina de la casa apunta al jardín, es conveniente plantar un árbol, poner una estatua o alguna otra cosa para esconderla.
LOS COLORES
Una de las mejores formas para que el Chi circule correctamente por nuestro jardín es componer diferentes espacios con distintos colores y aromas agradables: jazmín, rosas, etc.
En un jardín no puede faltar el bambú. Simboliza el crecimiento, la flexibilidad y la fuerza.
EL AGUA
Otro elemento muy importante y que no puede faltar en un entorno diseñado con Feng-Shui es el agua.
Lo ideal es una corriente de agua natural. No siempre podremos tenerla, pero se puede sustituir por un estanque artificial con una pequeña cascada en la que el agua se dirija hacia la puerta de la casa. La cantidad de agua debe estar en proporción al tamaño de la casa.
El agua simboliza la economía, y está considerada por los chinos como el elemento que nos trae la fortuna. Una cantidad de agua relativamente importante, bien situada, nos debe aportar mucho bienestar.
Las mejores zonas en donde poner agua, en general, son el norte, el este y el sureste. Hasta el año 2024 además, se puede poner en el suroeste. Es importantísimo no poner agua en el noroeste, el oeste, el noreste y el sur, si no es que un estudio personalizado de la casa nos diera una combinación buena para el agua en alguna de estas zonas.
Dentro del estanque se pueden poner peces dorados o plateados, que simbolizan las monedas, y también una tortuga, que representa la longevidad y la estabilidad.
El agua representa el yin, y para encontrar el equilibrio nos falta el elemento yang, que en los jardines son las rocas. Hay que destinar un espacio a una decoración rocosa sobre una pequeña elevación de tierra y que pueda ser visible desde diversos puntos del jardín. Esta disposición de rocalla favorece la circulación del Chi.
LA ENTRADA
El jardín de la parte delantera de la casa es muy importante, es el que recibe a las personas y les da la bienvenida, por ello debe ser discreto y suave, pero con la fuerza suficiente para que se diferencie la casa de la calle.
LOS ARBOLES
Cada árbol que forma parte del jardín tiene su simbolismo: el pino representa la nobleza, la integridad y la longevidad. El cerezo es la armonía entre el cuerpo y la mente. La flor de loto, que sobresale de las aguas sucias, representa la pureza y la verdad. El bambú, que aguanta todos los vientos sin romperse, es el hombre honorable. La orquídea, con su perfume casi imperceptible, es el caballero elegante.
El Feng-Shui no establece reglas para la selección de las plantas, sólo hay que aplicar un criterio práctico para conseguir un entorno armonioso con una mezcla de árboles, arbustos, flores y plantas aromáticas.
LAS SENSACIONES
El camino que conduce a la casa nunca tiene que estar en línea recta y las plantas no deben bloquearlo.
Nuestro jardín debe proporcionarnos paz y una sensación de inmensa tranquilidad. Nos debe hacer sentir ganas de recorrerlo muy despacio, como si contempláramos una obra de arte que va cambiando día a día y donde podemos encontrar un nuevo aspecto aún no descubierto. Nos debe invitar a la meditación.
Debemos sentirnos en medio de una orquesta de olores, formas, colores y sensaciones.
Si al terminar de diseñar el jardín, cuando lo contemplamos, nos da la sensación de paz y tranquilidad, seguro que habremos conseguido un jardín con un buen Feng-Shui.
Es importante que el jardín se mantenga siempre sano, así transmitirá la sensación de armonía y prosperidad, de lo contrario, nos conectará con los aspectos más negativos de la existencia.
Hay que intentar mantener un equilibrio entre lo lleno y lo vacío. Un jardín con las plantas excesivamente crecidas representa una energía yang incontrolada, por el contrario, una vegetación demasiado baja nos dará un exceso de energía yin.
Si conseguimos un entorno como el que acabamos de comentar, la energía que entrará en nuestra casa será armoniosa, las combinaciones de estrellas negativas no lo serán tanto y las combinaciones favorables estarán muy potenciadas.
0 comentarios:
Publicar un comentario